Con este texto, el autor, realiza una reflexión sobre lo que es la literatura infantil, lo que significa y lo que ha venido significando a lo largo de la historia de la literatura, puesto que se consideraba a la literatura infantil carente de calidad y de condiciones literarias.
En el texto, el autor nos hace un repaso de los tipos de literatura infantil de los que podemos hablar:
o La literatura ganada, que engloba todas aquellas producciones que no nacieron para los niños, pero que, andando el tiempo, el niño se las apropió o ganó o se le destinaron, previa adaptación o no.
o La literatura creada para los niños, que es la que tiene ya como destinatarios específicos a los niños. De una forma o de otra esta literatura infantil tiene en cuenta, según los cánones del momento, la condición del niño.
o La literatura instrumentalizada. Referida a la gran cantidad de libros que se produce ahora sobre todo para preescolar y Ciclo inicial de la E. G. B. Debemos hablar más de libros que de literatura. Nos referimos a todos esos que aparecen en series en las que, tras escoger un protagonista común, lo hacen pasar por distintos escenarios y situaciones: la playa, el monte, el circo, etc.
Es en esta última donde realiza su crítica personal, ya que considera que literatura infantil ha de ser, sobre todo, respuesta a las necesidades íntimas del niño y que si este tipo de literatura se impusiese ( algo está sucediendo) nos veríamos abocados a una crisis de la literatura de creación para los niños. Además de esto, explica cuales son los factores de los que nace la transición hacia una literatura específica y cuáles son las dos tesis por la que se ve reclamada la literatura infantil:
o La tesis liberal, llevada a sus últimas consecuencias, niega no sólo la realidad de la literatura infantil, sino también la necesidad de una literatura especializada para niños.
o La tesis dirigista propugna una literatura específica para los niños.
Y por último, realiza una reflexión sobre la Literatura Infantil y la escuela, donde señala a esta última como la institución más eficaz y directa en la transmisión del gusto por la lectura y la promoción de esta, algo que lleva consigo dos consecuencias destacables, como es la instrumentalización de la literatura y a la apertura de la escuela a la literatura infantil.
Por último, decir que el análisis que este autor ha hecho de la literatura infantil, me ha parecido muy buena porque se centra en diferentes aspectos y puntos de vista. Como futuras docentes, debemos darle a la literatura infantil, la importancia que tiene, puesto que la edad de infantil, es la etapa donde se establecen las bases del desarrollo tanto como persona, como alumno, etc. Por eso desde edades tempranas debemos fomentar la lectura, para que tomen ese hábito desde bien pequeños. Judith Griñán Rodes.
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